De acuerdo con la Encuesta sobre las expectativas de los Especialistas en Economía del Sector Privado del Banco de México, correspondiente a marzo de 2020, en la que participaron 35 grupos de análisis y consultoría entre el 24 y 27 de febrero, el panorama económico del país resulta desfavorable en materia de negocios, inflación y Producto Interno Bruto (PIB); asimismo, los especialistas encuestados anticiparon una baja generalizada en torno a la expectativa de crecimiento para 2020 y 2021.
Las cifras que figuran en el análisis comprenden el periodo de diciembre 2019 a diciembre en el año en curso, y presentan alzas con respecto a los años anteriores. En cuanto a la inflación general, la expectativa para 2020 es de 3.52 puntos, correspondiente a febrero, y 3.75 a marzo; asimismo, la expectativa para 2021 es de 3.53, correspondiente a febrero, y 3.61 a marzo. Por su parte, la inflación subyacente presentó un alza de magnitud similar, con 3.47 y 3.61 puntos respectivamente.
Ante este hecho, se presentan expectativas desfavorables en el crecimiento real del PIB, con altas probabilidades de incertidumbre y volatilidad; la media para marzo de 2020 es de -3.99, mientras que la proyección de promedio para los próximos diez años es de 2.07. Sin embargo, pese a la posibilidad de crecimiento a largo plazo, el entorno actual presenta factores que podrían obstaculizar el crecimiento económico de México.
Según los especialistas encuestados por el Banco de México, los factores principales que podrían mermar la economía en México para la próximos seis meses son: condiciones externas, donde figuran de manera preponderante la debilidad del mercado externo y la economía mundial, inestabilidad financiera internacional, el precio de exportación del petróleo, coyunturas geopolíticas, mercados de estados unidos, y niveles de tasas de interés externas; condiciones internas, con la debilidad del mercado interno, plataforma de producción petrolera, falta de competencia de mercado, niveles de endeudamiento, e incertidumbre; gobernanza, en especial la cuestión de la falta de estado de derecho y corrupción; inflación, con con el aumento en costos de diversos sectores; política monetaria, a propósito de los elevados costos de financiamiento interno; y finanzas públicas.
La consultoría sobre estos factores representa una evaluación numerada por parte de los especialistas; los elementos de mayor importancia con las expectativas más desfavorables son la gobernanza, condiciones económicas internas, y finanzas públicas. El consenso de analistas apunta a una reducción en la expectativa de mejora en el clima de negocios como una de las problemáticas de mayor envergadura.
Otra consecuencia directa de este análisis sobre el panorama económico es la preocupación por el tipo de cambio del peso frente al dólar estadounidense, cuyo riesgo de incrementar seguirá durante 2020, así como el déficit presente en la balanza comercial, cuenta corriente, e inversión extranjera directa.