Dos personas fallecieron y 110 nuevos casos fueron confirmados con la enfermedad de COVID-19, causada por un coronavirus, que aumentan a 585 la cantidad de personas contagiadas por el virus SARS-CoV-2, informó la noche del jueves la secretaría federal de Salud.
"Tenemos 585 casos confirmados, 2.965 casos que son negativos (en las pruebas de laboratorio), y 2.156 casos sospechosos en este momento; se han presentado dos defunciones más, para un total de ocho (personas fallecidas) al día de hoy", dijo en conferencia de prensa la directora de Investigación Operativa Epidemiológica, Ana Lucía De la Garza Barroso.
Este país ha entrado a la fase dos de "contagios comunitarios", en la que ya no solo son contagios importados.
En efecto, los "casos importados" de otros países son 398, un 68 por ciento, mientras que los "casos asociados" a contagios importados comienzan a crecer y suman 151, un 26 por ciento del total; mientras que 36 aparecen como "casos sin antecedentes", un 6 por ciento, que se consideran contagios comunitarios locales.
Para la atención de las personas contagiadas solo 10 por ciento requirió hospitalización.
"De los hospitalizados graves son únicamente tres por ciento y el seis por ciento se mantiene estables", aunque internados en centros hospitalarios o unidades de salud
Un 86 por ciento recibió atención en forma "ambulatoria" sin necesidad de cuidados hospitalarios.
La mayoría de infectados son hombres, 58 por ciento y un 42 por ciento en mujeres.
Por su parte, el subsecretario de Salud, Hugo López Gatell, vocero principal para la pandemia, planteó que la suspensión de actividades educativas y laborales en la llamada "Jornada de Sana Distancia, plantea "un fenómeno complejo que puede afectar las relaciones humanas".
Las intervenciones estatales de salud pública son "necesarias indispensables para el control de la epidemia, pero requieren modificar la vida pública y pueden tener consecuencias no deseadas", planteó el funcionario.
Uno de los resultados es "la afectación social y económica de las personas más desfavorecidas".
México tiene la mitad de las personas viviendo en pobreza como resultado de políticas económica durante varios años, comentó.
"Un aspecto es prevenir afectaciones relacionados con el estado de aislamiento en casa, que puede implicar una convivencia más estrecha en la que puede aumentar la violencia contra las mujeres", advirtió López-Gatell.
Por su parte Nadine Gasman, presidenta del Instituto Nacional de la Mujer, recomendó repartir el trabajo en casa, "atención a la educación de los niños" con actividades a distancia, ya tender a la población de mujeres que son cabezas de sus familias.
"La contingencia de hacernos pensar en la redistribución de la carga laboral en los hogares, reorganizando el trabajo en casa con solidaridad", dijo Gasman.
Una muestra de la desigualdad del trabajo doméstico y de cuidados del hogar y enfermos en este país, es que recae en 39 horas semanales de las mujeres y solo 14 horas de los hombres.