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Este miércoles, un tribunal de apelaciones de Los Ángeles, Estados Unidos, determinó que la cantante Katy Perry no deberá pagar 2.78 millones de dólares, esto luego de ser acusada por plagiar un tema de rap cristiano para la canción Dark Horse.
La jueza que llevaba el caso de Perry explicó que tras investigar la canción Joyful Noise, de Marcus Gray, supuestamente utilizada por la estrella, llegó a la conclusión de que el éxito de la cantante no cuenta con elementos para ser considerada como plagio.
En el dictamen, el tribunal de apelaciones mencionó que Joyful Noise no tiene características distintivas para ser protegida por derechos de autor, por lo que la nacida en Santa Bárbara, California, quedaría libre de los cargos.
“Es indiscutible en este caso, incluso viendo la prueba que es más favorable para los demandantes, que los elementos característicos de Joyful Noise no son una combinación particularmente única o rara”, aseguró la nueva conclusión.
Sin embargo, tras darse a conocer el veredicto, los abogados del demandante buscarán apelar la decisión de la jueza, debido a que el tribunal anterior, que impuso la multa a Katy en agosto del año pasado, estaba de acuerdo con que la cantante había hecho plagio.
De hecho, Marcus Gray indicó que, en caso de ganar la demanda, pediría a la cantante recibir una parte de los 40 millones de dólares que dejó la canción durante su estreno y presentación en el Super Bowl de 2015.
Aquí, ambas canciones:
