Las aguas se están moviendo en estos momentos al interior de la Secretaría de Seguridad Ciudadana del Municipio de Puebla y será en cuestión de días, si no es que horas, cuando se pueda dar un cambio de timón en esta dependencia.
El deseo de muchos está a nada de volverse realidad, pues Lourdes Rosales Martínez dejará la SSC luego de las múltiples críticas recibidas por el poco perceptible trabajo para disminuir los índices de inseguridad en la capital.
Sin embargo, en sustitución de Rosales Martínez llegará un personaje que fue muy cercano al morenovallismo y que arrastra a sus espaldas un negro pasado que, incluso, lo mantuvo en prisión por medio año.
Nos referimos a José Miguel Jiménez Castillo, quien es hermano de la exdiputada federal del PAN Blanca Jiménez, y esposo de la hoy diputada Mónica Lara, quien también en su pasado fue una férrea morenovallista.
Con las reservas del caso, pues en política nunca se sabe quién dice la verdad y quién miente por convivir, muchos señalan que el finado Rafael Moreno Valle traicionó en su momento a Jiménez Castillo, pues supuestamente le había prometido la luna y las estrellas.
La cosa es seria, pues Jiménez Castillo fue ligado incluso con narcotraficantes y eso derivó en su detención. La supuesta traición en contra de Jiménez Castillo se la achacan al exoperador de Moreno Valle, Eukid Castañón, quien habría trabajado para que llegara a la cárcel en 2014.
Pero insisto, solo Dios sabe cuánto es verdad y cuánto es mentira.
Su esposa, Mónica Lara, era cercana a la acaecida gobernadora Martha Erika Alonso e incluso esta amistad la llevó al Instituto Poblano de la Mujer, puesto que dejó cuando se presentó una fractura debido a su apoyo hacia Ernesto Cordero en la contienda interna por la dirigencia nacional del PAN.
Así como su esposo, Mónica Lara presuntamente fue marginada del PAN y terminó encontrando acomodo en Morena, donde la pareja tiene como uno de sus principales aliados a Fernando Manzanilla Prieto.
Lo cierto es que José Miguel Jiménez Castillo, quien ya fue parte de la nómina de Seguridad Pública Municipal en los tiempos de Luis Paredes Moctezuma, tendrá una papa no caliente, sino hirviente en la Secretaría de Seguridad Ciudadana.
Y es que el bajo perfil que siempre ha manejado parece no ser suficiente para enfrentar todas las mañas heredadas por Manuel Alonso García, pues en la dependencia hay muchas “fichitas” que le siguen rindiendo cuentas a este personaje de negro historial.
Días, si no es que horas, separan a José Miguel Jiménez Castillo de su máxima oportunidad en el servicio público. ¿Estará a la altura? Eso está por verse.
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