Parece que el Gran Premio de Australia de Fórmula Uno se celebrará la próxima semana en Melbourne como estaba previsto, luego de que el Gobierno australiano revelara hoy jueves que no implementará una prohibición de viaje a las personas que lleguen de Italia.
Con un gran número de miembros de las escuderías procedentes de Italia, incluida Ferrari, se temía que el evento pudiera enfrentarse a una posible cancelación en caso de que el personal clave no pudiera asistir debido a una prohibición relacionada con la COVID-19.
El Gobierno australiano confirmó este jueves que presentaría una "detección mejorada" para los viajeros que llegan de Italia, país europeo que recientemente ha experimentado uno de los peores brotes de la enfermedad.
"Esas medidas de detección mejoradas estarán vigentes para aquellos visitantes que han venido vía Italia y para los australianos que están regresando de ese país", dijo el primer ministro, Scott Morrison, a los periodistas.
Sin embargo, el Gobierno introdujo una prohibición de viaje temporal para la República de Corea, desde donde, según Morrison, llegan más de cinco veces la cantidad de personas a Australia que desde Italia.
También este jueves, el jefe del Gran Premio de Australia, Andrew Westacott, dijo a la cadena 3AW que sin la prohibición de viaje desde Italia, el evento está "preparado y listo" para celebrarse.