Un avión Boeing 777, con más de 100 personas a bordo, aterrizó de emergencia este viernes en el aeropuerto moscovita de Vnúkovo tras rajarse uno de los cristales de la cabina de los pilotos en pleno vuelo.
"El avión aterrizó en el aeropuerto de Vnúkovo, todos los ocupantes están ilesos", dijo a Sputnik una fuente de los servicios de emergencia.
La fuente precisó que en la aeronave que había despegado del aeropuerto de Sheremétievo y operaba el vuelo SU6275 entre Moscú y Bangkok, se encontraban 190 pasajeros y 14 miembros de la tripulación.
El cristal de la cabina de los pilotos se quebró cuando el avión sobrevolaba Kazajistán, lo que obligó a la tripulación a retornar a Rusia.