El crack argentino reacciona de manera tajante ante las declaraciones vertidas por el secretario técnico Eric Abidal acerca de los malos resultados del equipo y la viciada atmósfera reinante.
No pintan bien las cosas para el histórico club de fútbol catalán. Tras la crisis de resultados, las lesiones de jugadores clave y el mal juego que ha obrado que el liderato en la Liga española pase a manos de su más encarnizado rival, el Real Madrid, y luego de la reciente salida del equipo de su entrenador, Ernesto Valverde, un nuevo foco de tensión aflora en el seno del equipo azulgrana.
En una entrevista concedida al diario deportivo Sport, Eric Abidal, actual secretario técnico del club y hasta hace unos años jugador de plantilla, declaró:
"Muchos jugadores no estaban satisfechos ni trabajaban mucho, y también había un tema de comunicación interna. La relación entrenador-vestuario siempre ha sido buena, pero hay cosas que como exjugador puedo oler. Comuniqué al club lo que pensaba y había que tomar una decisión".
En principio, las declaraciones de Abidal eran una respuesta a la pregunta de cuáles fueron los motivos del despido de Ernesto Valverde como primer entrenador del equipo. Sin embargo, es evidente que sus palabras también atañen al ambiente interno dentro de la plantilla, a parte de la cual parece señalar como causante de la precipitada salida de Valverde. Tal es así, que no otro sino la estrella Leo Messi, dándose por aludido, respondió de manera inmediata a través de su cuenta de Instagram:
"Sinceramente no me gusta hacer estas cosas pero creo que cada uno tiene que ser responsable de sus tareas y hacerse cargo de sus decisiones. Los jugadores de lo que pasa en la cancha y además somos los primeros en reconocer cuando no estuvimos bien. Los responsables del área de la dirección deportiva también deben asumir sus responsabilidades y sobre todo hacerse cargo de las decisiones que toman. Por último creo que cuando se habla de jugadores, habría que dar nombres porque si no se nos está ensuciando a todos y alimentando cosas que se dicen y no son ciertas"
A partir de aquí, una reacción en cadena de consecuencias imprevisibles parece haberse apoderado del Barça.
Las especulaciones se abren paso y todo tipo de conjeturas pueblan el mundo 'culé'. En un momento en que se están negociando las condiciones del nuevo contrato de Leo Messi, su renovación podría correr peligro.
La desconfianza respecto a los planteamientos tácticos del nuevo entrenador, Quique Setién, es palpable, por cuanto no han dado resultado y se ha vuelto al estilo que profesaba el destituido Valverde. Jugadores como Busquets o Rakitić, que habían perdido protagonismo, podrían haberse contado entre los partidarios de cesar a Valverde, pero el juego del equipo apenas tiene visos de mejorar, habida cuenta de que jugadores clave, como el uruguayo Luis Suárez o el francés Dembélé, siguen lesionados.
[COMUNICADO MÉDICO]
— FC Barcelona (@FCBarcelona_es) February 4, 2020
Las pruebas realizadas esta mañana a @Dembouz han mostrado que el jugador tiene una rotura completa del tendón proximal del bíceps femoral del muslo derecho. En las próximas horas se determinará qué tratamiento seguirá para su recuperación pic.twitter.com/Po508adRW0
En cualquier caso, la reunión de urgencia entre Eric Abidal y el presidente del club, Josep María Bertomeu, que tendrá lugar el 5 de febrero, no augura una rebaja de la tensión, al menos a corto plazo. Y la razón no es otra que la soterrada desconfianza de Bertomeu hacia Abidal, dado el fracaso del segundo en su búsqueda de refuerzos en el mercado de invierno, donde destaca la fallida tentativa en Doha de fichar como primer entrenador al histórico exjugador blaugrana Xavi, actualmente técnico del equipo catarí Al Sadd.