Migrantes que salieron en caravana de Honduras el miércoles pasado comenzaron a llegar a la frontera sur de México, informó hoy la Secretaría de Gobernación mexicana (Interior).
La dependencia señaló, en un comunicado, que el Instituto Nacional de Migración (INM) atenderá a los integrantes de la movilización que busquen un ingreso regular, ordenado y seguro a territorio mexicano.
Indicó que los centroamericanos podrán solicitar trabajo temporal en el sur mexicano o refugio al país, trámite para el que tendrán que permanecer en esa misma región del territorio hasta que se resuelva si se les otorga asilo.
"Quienes de manera libre y voluntaria lo decidan, podrán permanecer en México en calidad de trabajadores temporales dentro de la zona sur del territorio nacional", expuso la dependencia responsable de la política interna de México.
Cientos de personas, entre ellas jóvenes y familias con niños, salieron en caravana el miércoles de la ciudad de San Pedro Sula, norte de Honduras, con la intención de dirigirse hacia la frontera de México con Estados Unidos.
Ese mismo día, la secretaria de Gobernación mexicana, Olga Sánchez Cordero, advirtió que México no facilitaría permisos para que los migrantes atraviesen el país hacia su frontera norte, y agregó que se les ofrecerían opciones migratorias sólo a los que buscaran quedarse en el país.
De acuerdo con la dependencia, los hondureños comenzaron a llegar a puntos fronterizos del estado de Chiapas (sureste), que es colindante con Guatemala, y la entidad por la que ingresa a México la cotidiana migración irregular desde Centroamérica.
La prensa local reportó que hoy por la mañana varios integrantes de la caravana se encontraban en el puente internacional que conecta a Ciudad Hidalgo, Chiapas, con la guatemalteca Tecún Umán sobre el río Suchiate.
En la zona, el comisionado del INM, Francisco Garduño, dijo a la prensa que existía un despliegue de agentes suficiente para garantizar una gobernabilidad y que los migrantes deberán sujetarse a los trámites migratorios.
"No es que entren y se les da un boleto del Metro. Tienen que hacer una serie de requisitos y esperar los términos de la ley y que la autoridad migratoria determine lo procedente", expuso el comisionado a la prensa local.
Por la mañana, el presidente mexicano Andrés Manuel López Obrador dijo que la caravana era de entre 2.500 y 3.000 hondureños y salvadoreños que pretenderían entrar al país, por lo que se les ofrecería empleo en la frontera sur, albergues y atención médica.
"Pero trabajo en nuestro país, se ofrece eso", apuntó López Obrador durante su conferencia matutina diaria.
La nueva movilización desde Honduras fue convocada a través de redes sociales y grupos de WhatsApp, al igual que las masivas caravanas de centroamericanos que cruzaron el país a finales de 2018 e inicios de 2019, las cuales tensaron la relación entre México y Estados Unidos.
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