El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, aseguró este miércoles que su administración no permitirá un operativo similar al denominado "Rápido y Furioso", aplicado por EEUU entre 2006 y 2011 para rastrear el tráfico de armas, porque significaría una nueva violación a la soberanía mexicana.
"Mientras estemos en el Gobierno no se va a permitir ningún operativo como el de 'Rápido y Furioso', porque, si recuerdan, fue una violación flagrante a nuestra soberanía, que causó mucho daño", anticipó este miércoles el jefe del Ejecutivo en conferencia de prensa.
"Rápido y Furioso" consistía en introducir armas a este país de parte de las autoridades de EEUU, rastreadas mediante chips electrónicos instalados en el armamento, que fue un fracaso porque el armamento fue utilizado para cometer crímenes.