La Liga española evalúa junto al Comité de Competición de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) cambiar el orden de los encuentros entre el Real Madrid y el Barcelona por las protestas en Cataluña. Esto se debe a una gran manifestación prevista en la ciudad de Barcelona para la fecha en la que debe disputarse el Clásico.
De aprobarse la medida, el choque previsto en el Camp Nou para el próximo 26 de octubre podría jugarse en el Santiago Bernabéu. Se informa que el veredicto final se tomará a más tardar el lunes o martes de la próxima semana.
El Real Madrid ve difícil el cambio de orden y plantea un aplazamiento del partido, comunica la prensa española. La dirección de los merengues considera que podría alterar la competición y perjudicar al resto de los clubes del campeonato.
La posición del Barcelona, por su parte, es que el juego debería llevarse a cabo en su estadio, como estaba previsto. El club catalán contaría así con una mayor motivación de sus aficionados y jugadores.
Las protestas en la capital catalana afectaron no solo a la liga de fútbol nacional. Así, la Euroliga de baloncesto denegó la petición del Barcelona de cambiar la fecha de su partido con el Alba de Berlín. El club pidió a los organizadores del torneo que el partido programado para este 18 de octubre en Barcelona se juegue el jueves 17. No obstante, la Euroliga no accedió a cambiar la fecha.
El pasado 14 de octubre, el Tribunal Supremo de España condenó por delitos de sedición, malversación y desobediencia a los 12 líderes políticos y civiles catalanes que se sentaron en el banquillo de los acusados por el proceso independentista de Cataluña. En particular, el ex vice presidente catalán, Oriol Junqueras, fue condenado a 13 años de prisión.
La sentencia generó una oleada de protestas masivas y de violentos enfrentamientos entre la Policía y los manifestantes.