La alcaldesa de Puebla, Claudia Rivera Vivanco, expresó que ante las demandas de las movilizaciones resurgen los temores del poder ante el cambio verdadero respondiendo con violencia y represión, esto tras el izamiento de la Bandera Nacional en el zócalo en conmemoración a los 51 años de los hechos ocurridos en Tlatelolco, en los que estudiantes y jóvenes fueron reprimidos por el gobierno de Gustavo Díaz Ordaz.
“En un siglo de transformaciones y sacudidas violentas de la historia, el 68 lejos de sorprendernos nutrió el espíritu de la rebelión de nuestro país y las esperanzas democráticas de un país que era ajeno a los cambios (…). Cualquier transformación profunda es el resultado de actores sociales, de sujetos múltiples y diversos, de aspiraciones que han sido sometidas por quienes se oponen al cambio de las estructuras”, expresó después del izamiento, acompañada también por funcionarios municipales y regidores.
Además, la presidenta municipal destacó que cambiar al país no es la voluntad de una sola persona ni tampoco de un grupo de privilegiados. Incluso, abundó que hoy México enfrenta nuevos retos, desafíos que provienen del pasado y de herencias autoritarias.
En este contexto, Rivera Vivanco resaltó la necesidad de transformaciones que requieren un impulso desde abajo y arriba.
“Nuevas generaciones hemos asumido el poder político y no estamos enfrentando a quienes hoy se oponen a esta trasformación en el país (…). El 68 es un referente, moviliza nuestras esperanzas y alienta nuestro sueños”, agregó.
Al final, acotó que los hechos del 68 no se olvidan y llamó a todos los sectores a seguir transformando al país e impulsar un cambio de régimen.
