De acuerdo con los informes de la empresa productiva del Estado, Petróleos Mexicanos (PEMEX), al mes de agosto se hilaron 4 meses consecutivos de alzas en la producción. Es el periodo más largo con resultados positivos desde 2016; si para el siguiente mes la tasa sigue creciendo será el periodo de mayor crecimiento desde 2008. Estos resultados demuestran que se está rescatando a la industria petrolera nacional.
La industria del petróleo en México estuvo severamente acosada durante el periodo neoliberal (1982-2018). Para atender los compromisos adquiridos en el Consenso de Washington, el gobierno debía privatizar todas las empresas públicas, así lo hizo con la mayoría; sin embargo, el movimiento popular evitó la privatización de PEMEX.
Dado que de 1982 a 2013 no se pudo impulsar la “Reforma Energética”, la estrategia de los gobiernos neoliberales fue el desmantelamiento paulatino de la empresa estatal; además, de forma dolosa, la gestión llevó a la empresa al debilitamiento y a la quiebra técnica, como lo denunciamos muchas veces en esta columna. El estancamiento de la empresa fue notorio durante todo el sexenio de Fox y Calderón, cuando la producción de hidrocarburos y derivados no tuvo crecimiento.
El sexenio de Peña Nieto se caracterizó por el mayor descaro de este direccionamiento alevoso hacia la quiebra de la empresa; la producción de petróleo crudo alcanzó los niveles más bajos desde 1990 y la producción de gasolinas empezó una caída libre, tal y como se muestra en la gráfica 1, los barriles diarios producidos se redujeron a la mitad.
Cabe señalar que en los 36 años del periodo no se construyó ni una sola refinería en el país, mientras que países como Brasil construyeron 18 y China 35. Además, se omitió el mantenimiento continuo de la infraestructura para que al finalizar el periodo de Peña Nieto sólo se utilizaba menos del 30% de la capacidad instalada. El contraste fue el gran negocio que hicieron los refinadores norteamericanos, ya que de cada 10 litros que consumimos de gasolina, 7 provienen del exterior, lo que se ha traducido en una peligrosa dependencia energética.
El programa de recuperación de la soberanía energética busca reactivar la capacidad productiva de la planta ya instalada y construir al menos 2 refinerías. A 8 meses de iniciado un nuevo gobierno, los resultados empiezan a notarse. De acuerdo con informes propios de PEMEX, el aprovechamiento de la capacidad instalada pasó de 30 a 50% lo que ha tenido como resultado que la producción de la gasolina regular haya aumentado 32% con respecto al último mes del sexenio de Peña Nieto, tal y como se observa en la gráfica 1.
Elaboración propia con datos de Pemex, 2012-2019
Por consecuencia, la importación de gasolina disminuyó a los mismos niveles de 2016 y el precio real promedio nacional de la gasolina no ha aumentado con respecto al mes de diciembre de 2018.
La extracción de crudo también ha aumentado de forma considerable, para el mes de agosto sumó 1.6 millones de barriles diarios que significan 3 meses sin caídas. PEMEX ha adelantado que en lo que va de septiembre, la producción ya rebasó los 1.7 millones de barriles y el ritmo indicaría que al finalizar el mes se llegarían a los 1.9 millones que igualarían la producción que se tenía a principios del sexenio anterior.
Las metas son que para el año siguiente las refinerías trabajen al 75% de su capacidad y la dependencia con el exterior disminuya a menos del 50%. Al tiempo que la extracción de petróleo supere los 2 millones de barriles diarios. Para ello se está invirtiendo fuertemente tanto en infraestructura como en el saneamiento de los pasivos de la empresa. El día de ayer se realizó la recompra de bonos más grande de la historia de PEMEX lo que devuelve a la empresa su grado de inversión y su vuelta a los mercados financieros.
Parece que el neoliberalismo como política económica ha llegado a su fin, se respira un nuevo porvenir. Ayer el honroso estado de Oaxaca aprobó otorgarle a la mujer la decisión sobre su propio cuerpo y en el Senado de la República se aprobó la Ley General de Educación que sustituye la “Reforma Educativa” que fue impuesta a sangre y fuego por el gobierno anterior. Paso a paso, vamos a cambiar todo lo que deba ser cambiado.
*Profesor-Investigador Facultad de Negocios, Universidad La Salle México
Miembro del Sistema Nacional de Investigadores
Twitter: @BandalaCarlos
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