Un agente judicial mexicano fue detenido por matar con su arma reglamentaria a un migrante hondureño a fines de julio ante su hija de 8 años, informó el lunes la Fiscalía General del estado Coahuila (norte).
La autoridad judicial informó "haber encontrado datos suficientes para acreditar la probable participación de Juan Carlos 'N', policía de la Agencia de Investigación Criminal, se solicitó y se cumplimentó la orden de aprehensión".
Los hechos ocurrieron cerca de la estación de ferrocarril de Saltillo, capital de Coahuila, donde los migrantes esperaban montar los techos del ferrocarril apodado "La Bestia" que recorre otros 400 kilómetros hasta la frontera con EEUU.
Las autoridades judiciales acusan al agente de investigación criminal de cometer un "delito de homicidio doloso calificado con ventaja, cometido en perjuicio de una persona de nacionalidad hondureña", dice el documento firmado por el fiscal general Gerardo Márquez Guevara.
La víctima fue identificada como Marco Tulio Perdomo, de 29 años, originario de la aldea Brisas del Mar, municipio caribeño de Santa Rosa de Aguán, departamento de Colón, una comunidad de solo 5.400 habitantes.
Las autoridades desmintieron la primera versión dada por una patrulla de los agentes judiciales que acusaron a la víctima de haber disparado un arma que sacó de "entre sus ropas".
"Se advierte que la víctima, el migrante que pierde la vida, es totalmente inocente respecto al entorno en el que se da la privación de esta vida, pues en ningún caso se advierte que haya participado en agresión alguna en contra de elementos de la Policía de Investigación Criminal", dice la acusación.
Los agentes judiciales participaban en un operativo "relacionado con la localización de personas dedicadas a la venta de narcóticos al menudeo", dijo el fiscal general de Coahuila.
Perdomo murió debido a una "mala actuación policial", señalan los fiscales.
"Esta Fiscalía reconoce la inocencia y la calidad de víctima de Marco Tulio 'N' quien pierde la vida y lamenta la comisión de estos hechos que involucran a un agente de la policía ministerial por el uso excesivo de la fuerza letal", dice el parte judicial.
Las autoridades continúan la investigación en relación con la acción de los otros cinco agentes judiciales que participaron en ese operativo.
La hija del migrante asesinado permanece en Saltillo convertida en menor no acompañada y bajo resguardo de la Procuraduría de los Niños, Niñas y de la Familia.
Testimonios de cuatro sobrevivientes, incluida la hija de la víctima recogidos por la Casa del Migrante de Saltillo indicaron que a la estación del tren apodado "La Bestia" llegaron agentes del Instituto Nacional de Migración y Policías Federales, antes de los judiciales que dispararon.
Sin embargo, las autoridades federales niegan cualquier participación de agentes migratorios o federales en el trágico incidente.