Gracias a la marcada ineficiencia del Poder Judicial mexicano, diversos personajes catalogados como “peces gordos” siguen nadando en aguas tranquilas sin miedo de ser capturados para comparecer ante la justicia por los supuestos hechos delictivos de los que se les acusa.
Emilio Lozoya, Carlos Romero Deschamps, Mario Marín Torres y el mismo exgobernador de Veracruz, Javier N. han logrado librar de alguna manera los dardos de la justicia en los diversos procedimientos que se llevan en su contra.
El exdirector de Petróleos Mexicanos, Emilio Lozoya Austin, ha sido ligado directamente al caso Odebrecht, por presuntamente haber recibido sobornos de parte de esta empresa, situación que le generó una orden de aprehensión.
Sin embargo, este miércoles el juez décimo catorce de distrito otorgó la suspensión definitiva de la orden de aprehensión en contra de Lozoya Austin, pues los delitos de los que se le acusan no ameritan prisión preventiva y puede seguir el proceso en libertad.
Esto contrasta con la detención de la madre de Emilio Lozoya en Alemania, esto en cumplimiento a una ficha roja emitida por la Interpol, también por supuestos sobornos en el caso Odebrecht.
El líder del Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana, Carlos Romero Deschamps, se adelantó a la justicia y logró el martes la suspensión de manera indefinida de cualquier orden de aprehensión o presentación ante las autoridades que se gire en su contra.
Lo anterior debido a que presuntamente la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) presentó ante la FGR dos nuevas denuncias contra Romero Deschamps y seis de sus familiares por los delitos de enriquecimiento ilícito y lavado de dinero.
De esta manera, Romero Deschamps se ha amparado ante una orden de captura en su contra por delitos que no ameriten prisión preventiva. Esta ya es la segunda suspensión que logra el líder petrolero en lo que va del año.
En el caso del exgobernador de Puebla, Mario Marín Torres, se presume que la Fiscalía General de la República (FGR) ya cuenta con la ubicación del exmandatario, quien tiene una orden de aprehensión en su contra por el delito de tortura en contra de la periodista Lydia Cacho.
No obstante, pese a que el mismo presidente Andrés Manuel López Obrador ha asegurado que Mario Marín será detenido, las autoridades parecen no tener mucha prisa en atrapar al llamado “Góber Precioso”, quien cuenta también con la ficha roja emitida por la Interpol.
Finalmente está el exgobernador de Veracruz, Javier N., que pese a ya estar detenido, logró el pasado lunes que un Tribunal Federal frenara la ejecución de la sentencia recibida por lavado de dinero y asociación delictuosa.
Con esta acción se frena también el eventual decomiso de bienes y cuentas que presuntamente son de su propiedad. Javier N. tiene 40 propiedades que presuntamente fueron adquiridas a través de prestanombres.
De esta manera, también está en análisis la sentencia de 9 años de prisión que Javier N. recibió en septiembre pasado, aunque eso no implica que vaya a abandonar la cárcel.
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