Día tras día, semana tras semana, la alcaldesa de Puebla, Claudia Rivera Vivanco, va acumulando errores que hacen casi insostenible su permanencia al frente del Ayuntamiento de Puebla, que vive momentos que no veíamos ni en la peor etapa de Gabriel Hinojosa, Luis Paredes o Blanca Alcalá.
Pero si hablamos de errores de la munícipe actual, uno de los más grandes tiene nombre y apellido, se trata ni más ni menos que de la secretaria general del Ayuntamiento, Liza Aceves, que en los pocos meses de administración ya no es soportada ni por los mismos regidores de Morena.
Liza Aceves se ha convertido en la versión femenina del impresentable diputado José Juan Espinosa Torres, pues es el ente que genera el conflicto y el mal ambiente al interior del cabildo capitalino, esto dicho por los propios regidores vinotintos.
Dicen los enterados que nadie tiene el ánimo siquiera de saludar a Liza Aceves en las sesiones de cabildo. Es tan pesada su presencia que el ambiente siempre es extraño cuando ella está presente. Tan repudiada es la secretaria del Ayuntamiento, que ha logrado unir a todos los regidores… en su contra.
Y esta mala vibra está pasando a la alcaldesa (como si la necesitara), pues Claudia Rivera ya ha perdido la compostura en el cabildo y se ha enfrascado en discusiones debido a las críticas recibidas, que siempre son tomadas como ataques por la munícipe.
Me cuentan que muchas de las decisiones que se toman en el Ayuntamiento de Puebla deben tener el visto bueno de Liza Aceves, lo que también ha llevado a que Claudia Rivera pierda el respeto por parte de regidores y trabajadores de la comuna.
Bien conocido es que lo peor que le puede pasar a un jefe es perder el respeto de sus subordinados, y gracias a Liza Aceves la alcaldesa no tiene el respeto del personal del Gobierno Municipal.
Aunque los regidores de Morena han pedido la salida de Liza Aceves, es un hecho que Claudia Rivera no la destituirá de su cargo. Las razones no las conocemos, pero parece que Aceves tiene el puesto más seguro que la misma alcaldesa.
Siguiendo con los errores de Claudia Rivera, debemos señalar que últimamente a la alcaldesa le ha dado por jactarse de triunfos que ni siquiera son suyos, como la disminución” de los índices de delincuencia en la capital.
Y es que debemos ser claros. Sin apoyo, estímulos y compra de nuevo equipo, la secretaria de Seguridad Pública y Tránsito Municipal, Lourdes Rosales, ha logrado bajar estos índices por su propia cuenta.
Por supuesto, Claudia Rivera no tardó en colgarse la medalla cuando lo único que ha hecho en este tema es repartir culpas por los índices de delincuencia en la ciudad.
Si alguna dependencia funciona en el Ayuntamiento es la SSPTM, que sin el apoyo de la máxima autoridad de la ciudad está trabajando para sanar a la capital en uno de los temas que más duelen, que es el de la inseguridad.
Lo de Claudia Rivera simplemente raya en lo absurdo, en lo insostenible. Sin embargo, todos sabemos que en el “mundo de caramelo” de la alcaldesa, todo su trabajo es de destacarse.