En estos días se desarrolla el mundial femenil de futbol desde Francia, con auténticos partidazos que no le piden nada al futbol varonil.
En medio de este furor que cada vez junta más fanáticos y reúne a grandes estrellas del balompié apoyando a sus selecciones femeniles, se recuerdan los inicios de esta disciplina con las mujeres que practicaron por primera vez el futbol de manera semiprofesional.
Hacia los años 60, países como Francia, Inglaterra e Italia prohibían la práctica de disciplinas como el futbol femenil; sin embargo, ante la petición de grupos que se habían organizado para jugar,se hizo un primer clasificatorio para un mundial no oficial.
El primer partido "oficial" fue un Francia - Países Bajos, el cual ganó la selección gala por 4-0 y donde varias de sus jugadores no pudieron asistir porque no recibieron el permiso para faltar en sus trabajos. Sin embargo, dicho partido fue el primer clasificatorio de la historia para un mundial femenil, que se desarrolló en México.
Fue en 1971 cuando México fue elegido gracias a la infraestructura con la que contaba del mundial varonil un año antes. Durante tres semanas, el mundo volteó a ver en el verano a las mujeres precursoras del futbol y brevemente fue el epicentro deportivo con patrocinio, transmisiones y apoyos.
Xóchitl, una niña de facciones indígenas y con su indumentaria de futbol fue la "mascota" del mundial donde México tuvo su mejor participación, pues llegó a la final, aunque perdió 3-0 contra Dinamarca.
Este primer mundial no oficial tuvo la participación de seis equipos y fue patrocinado por el consorcio de bebidas Martini & Rossi, quien pagó el hospedaje, traslado y manutención de todos los equipos. También hubo otras marcas como Bacardí y la compañía de té, Laggs.
Inglaterra, Francia, Estados Unidos e Italia se quedaron en el camino. En el mítico Estadio Azteca, 110,000 aficionados vieron el juego final donde Dinamarca se alzó con el trofeo.
Para muchos jugadores y directivos de la época, ese mundial fue vendido desde el comienzo como un éxito y lo fue. Sin embargo, los 19 años posteriores no hubo apoyo hasta que la FIFA volteó a ver un potencial mercado y fue hasta 1990 cuando se dio el primer torneo oficial en China, el cual ganó Estados Unidos.
Llama la atención que la jugadora del torneo fue la inglesa Leah Caleb, que fue la estrella de su equipo con tan solo 13 años.