A veces un poco tarde, pero siempre el karma hace de las suyas contra personas que en su momento se burlaron de la buena suerte que vivieron. Ejemplo claro es el diputado local del PT, José Juan Espinosa Torres, quien está en el paredón debido a sus malos manejos en su época como alcalde de San Pedro.
La desgracia ajena nunca debe ser motivo de burla, pero cómo se podría tener compasión a un diputado que durante toda su carrera política se ha comportado como un auténtico porro, un cáncer para Puebla que ha sido difícil de erradicar.
Bien me lo comentó el diputado de Morena Emilio Maurer: José Juan Espinosa es un político que incita a la confrontación, que gusta de ver pelear a todo mundo, que siempre busca el encono y viciar el ambiente donde se pare.
Fue quien provocó el zafarrancho en el MM Grand tras las elecciones de 2018, aventó la piedra y escondió la mano para que otros resultaran raspados en un acto violento generado por él. Llegó al Congreso y las cosas no fueron diferentes.
Sobajaba a todo mundo y quiso imponer su ley. Desafortunadamente, muchos de sus compañeros en la legislatura local siguieron cada uno de sus “consejos” y el Congreso se convirtió en una sucursal de la Arena Puebla.
Pero las cosas han cambiado para mal para JJ, luego de que el Congreso aprobara por unanimidad la apertura de su cuenta pública de 2016, donde hay irregularidades por más de 18 millones de pesos.
¡18 millones de pesos! La pregunta es si todo su circo, todo su show, todo su pataleo para ocupar un lugar en el Congreso local tenía como único objetivo ocultar ese gran desfalco a las arcas del municipio cholulteca.
José Juan es un político doble cara que por la mañana dice una cosa y por la noche otra. Increíblemente, renegaba de Rafael Moreno Valle Rosas y fue en el gobierno del fallecido senador cuando Espinosa Torres pasó sus mejores momentos.
No solo JJ debe estar temblando con esta situación, pues su “chalán” Luis Alberto Arriaga Lila, alcalde de San Pedro y uno de los culpables de la debacle de Morena en las pasadas elecciones, también debe estar tamañito.... aún más.
Y es que dicen los que saben que el otrora lector de noticias no hacía ningún movimiento si no lo autorizaba antes José Juan. Al sentirse protegido, Luis Alberto Arriaga podía pasearse cachetonamente por el mundo sin que nadie le dijera nada.
San Pedro podía hundirse en la inseguridad, mientras el “alcalde” disfrutaba de los placeres que da el ser protegido por alguien que se sentía Dios en el poder.
Insisto, el karma llega tarde o temprano y el turno de José Juan Espinosa de rendir cuentas por sus malos actos parece que ha llegado.
Pedro Gutiérrez, el patrocinador del golpeteo a Cárdenas
Hablando de políticos chuecos y despreciables, a los oídos de este escribidor llegó un rumor que no dudo que sea verdad y donde está implicado el panista Pedro Gutiérrez, aprendiz de otro porro de la política llamado Javier Lozano.
Pedro Gutiérrez, famoso por el asqueroso video porno en el Conalep, resulta ser el patrocinador del golpeteo contra el excandidato del PAN a la gubernatura, Enrique Cárdenas, y para ello se conchabó a algunos reporteros.
Y es que resulta que este supuesto “político” reunió a un grupo de reporteros para que, mediante una compensación económica, reventaran a Cárdenas en sus ruedas de prensa cada que pudieran.
Los nombres de los periodistas, amable lector, no los conozco por completo y si los supiera no los revelaría, porque no vale la pena dañar una carrera por culpa de un tipo como Pedro Gutiérrez. O no vale la pena mencionar a ínfimas personas.
Sin embargo, una pregunta me asalta: ¿Quién resulta más tonto? ¿Pedro Gutiérrez por tratar de golpear a un candidato sin posibilidades de triunfo? ¿O esos reporteros que se prestaron al jueguito de un muerto de la política como Pedro Gutiérrez?