Mientras que en Moscú los rusos disfrutaban de unos días con temperaturas realmente veraniegas, a más de 1.000 kilómetros, en la región de Sverdlovsk, caía una nevada que dejó el territorio completamente blanco.
Los meteorólogos rusos ya lo habían visto venir. El 28 de abril iba a nevar y así fue. La ventisca dejó el norte de la región con un manto blanco, incluida su capital, Ekaterimburgo. Y justamente ahora que los rusos empezaban sus vacaciones de mayo coincidiendo con la Pascua ortodoxa.
La mayoría de las ciudades de la región retrocedió hasta diciembre, cuando en Rusia es invierno. No lograron superar los 2 ºC y no lo harán hasta el miércoles. También seguirá nevando hasta entonces. Incluso en algunas partes de la región se esperan temperaturas de —15 ºC. Y eso que en Rusia ya es primavera.