Una clínica veterinaria de Melbourne ha rescatado a una zarigüeya huérfana que, por algún tipo de mutación, posee un color amarillo parecido al de Pikachu, un personaje de la caricatura japonesa Pokémon.
En lugar de su habitual color marrón, el pelaje de Pikachu es amarillo, debido a sus bajos niveles de melanina. Al ser una especie nocturna, esta coloración lo vuelve vulnerable ante la amenaza de depredadores, como los búhos.
Según las autoridades, Pikachu pudo caer de la espalda de su madre, tiene unos 5 meses de vida, además de un estado avanzado de desnutrición y presenta un comportamiento sumamente ansioso.
Los expertos consideran que lo más apropiado para el ejemplar será vivir en el centro de preservación de la naturaleza del lugar, donde estará lejos de amenazas, informó 20 minutos.