El dueño de una boa constrictor vivió en carne propia lo peligroso que puede llegar a ser darle de comer.
En un video grabado en la casa del hombre se ve cómo pretendía darle de comer un conejo a su pitón. Para atraer la atención de la serpiente, el individuo mueve de un lado a otro el conejo. No obstante, la boa se equivoca y ataca la mano de su dueño, clavándole los dientes.
Durante aproximadamente un minuto, la serpiente no suelta la mano del hombre, que, a juzgar por sus gestos y la sonrisa en la cara, parece estar completamente tranquilo.
Instantes después, su mano empieza a sangrar y la pitón la suelta como si nada hubiera ocurrido. Al segundo intento, la serpiente logró agarrar al conejo y volvió a su terrario.