Un adorable gatito probó que la valentía no tiene nada que ver con el tamaño.
Smudgie, un minino de pocas semanas de vida, no permitió que Jaxson, su 'hermano' canino, utilizara su puerta de acceso a la casa. Pese a la enorme diferencia de tamaño entre las dos mascotas, el minúsculo gato dejó bien claro al perro quién es el jefe.