William Bancroft y su familia fueron expulsados del restaurante IHOP cuando el pequeño que nació sin brazos usó sus pies para comer unos hot cakes, ocasionando que el personal del establecimiento los sacaran del local en Arkansas, Estados Unidos.
Según los padres del pequeño de 3 años, cuando el gerente del establecimiento se percató de que el niño estaba utilizando sus pies, comenzó a discutir con sus progenitores, causando la retirada de la familia sin pagar su consumo. Otros clientes, en su apoyo, hicieron lo mismo, además de reclamarle al personal la acción discriminatoria.
Mediante un video publicado en redes sociales, la familia comentó que antes de entrar al restaurante le lavaron los pies al niño: “solemos ir a otros restaurantes de la zona y nunca nadie había dicho nada sobre él”, comentaron en la grabación.
Por su parte, la cadena de restaurantes ha difundido un comunicado expresando su disculpa, afirmando que sus empleados tendrán mejor formación sobre el trato con personas con discapacidad, informó 20 minutos.