El pasado viernes, el Estadio Jalisco vivió un momento lleno de orgullo combinado con melancolía, pues el eterno capitán, Rafael Márquez, se despidió de la afición rojinegra, ya que no volverá a pisar esa cancha como jugador en activo.
Algunas veces villano, pero la mayoría como héroe, Rafael Márquez deja un legado en el futbol suficiente para que sea considerado como el mejor jugador mexicano de la historia.
Muchos gritarán los nombres de Hugo Sánchez y Cuauhtémoc Blanco, pero ninguno puede presumir el palmarés del zamorano, sobre todo a nivel internacional.
El llamado “Kaiser” ganó 2 UEFA Champions League, 4 Ligas de España, 1 Copa del Rey, 3 Supercopas de España, 1 Liga de Francia, 1 Copa de Francia, 1 Supercopa de Francia y 1 Mundial de Clubes, así como 2 Ligas MX.
Con selección mexicana puede presumir 2 Copas de Oro y 1 Copa FIFA Confederaciones. Además de haber jugado 4 Copas del Mundo, con la latente oportunidad de estar en su quinta cita mundialista.
Atlas, Mónaco, Barcelona, New York Red Bulls, León y Hellas Verona deben estar orgullosos de haber tenido entre sus filas a Rafa Márquez, el mejor jugador que ha dado México al mundo.
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