A propósito de la llegada a los estudios Universal (en Hollywood) de la muñeca Hello Kitty, emblema de muchas generaciones infantiles, es oportuno indagar en dicha figura que ha influido en millares de mujeres mexicanas y la cual también alberga una demoníaca leyenda (que contrasta con la imagen de ternura que inspira dicho personaje).
Creada en la década de los años setenta, la popular figura de la minina blanca sin boca causó un gran auge en nuestro país durante los años ochenta, en especial entre las menores de edad, porque representó una especie de símbolo femenino, que fungía como una contraparte de lo que Mickey Mouse era para algunos varones.
Posteriormente, la marca originada en Japón vivió una gran diversificación durante los años noventa, tal y como lo señala Eloisa, quien se definió a sí misma como una exfanática de la felina vestida de rosa.
"Me gustó, pero maduré, ahora me gusta más Darth Vader (ríe). Me gustaba porque tenía cosas muy 'padres': desde ropa, cosméticos, estuches y plumas. Había de todo y era 'fresa la onda'. Ahora ya se diversificó más y la venden en todos lados, pero antes era lo máximo en la escuela llevar un artículo de esa marca", detalló.
Abundó que Hello Kitty es tan exitosa entre varias féminas porque se vuelve una obsesión, además de que es un personaje con el que algunas mujeres se identifican; platicó que en cierta ocasión compró una carpeta de dicha marca, la cual le costó 600 pesos, pero nunca usó.
Igualmente, mencionó que su presencia en las tiendas de conveniencia, como los Oxxos, da fe del fenómeno mundial que representa Hello Kitty, marca que puede verse impresa “en infinidad de chácharas”.
La felina con moño inconfundible estará presente en los estudios Universal a través de una línea exclusiva de productos y caramelos inspirados en clásicos fílmicos distribuidos por dichos estudios, por ejemplo "Tiburón", "Psicosis", "Parque Jurásico", "King Kong", entre otros.
¿Una muñeca mala?
Sobre el par de leyendas relacionadas con el imaginario Hello Kitty, que hablan de un origen infernal, así como de un pacto con el diablo para sanar a una niña de cáncer, o de que su denominación, en chino, significa "Hola demonio", un par de ciudadanas consideraron que es "pura payasada" o "fake new" de Facebook.
Sin embargo, ciertos cibernautas aseguran que en los años setenta, cuando fue creada dicha gata, existió una adolescente en fase terminal de cáncer de boca, cuya madre accedió a sectas satánicas para tratar de sanarla.
Supuestamente, la progenitora juró diseñarle al "patas de cabra" una marca que fuera famosa en todo el planeta, a cambio de que su retoño sanara. En este sentido, destacaron que Hello Kitty no tiene boca debido a que esa era la parte enferma de la niña que recibió los favores.
Pero, probablemente, dichos relatos urbanos obedezcan más a esos halos de misticismo de los cuales las longevas marcas echan mano para preservar su existencia en el mercado.
Hay que recordar lo ocurrido en 2014, cuando un antropólogo aseguró que Kitty no era una felina, sino una niña, así como que caminaba en dos patas y tenía una mascota llamada Charmmy Kitty.
Sea lo que sea, lo que empezó como un simple producto para adornar monederos se ha convertido en una de las marcas más poderosas a nivel mundial, que ha servido para inspirar animes, exposiciones y una gran diversidad de artículos en el mercado "negro" o "pirata".