Uno de los lugares místicos con los que cuenta el estado de Puebla es sin duda la Laguna de Alchichica, ojo de agua que sirvió como centro ceremonial para civilizaciones prehispánicas y que cautivó al mismo Jacques Cousteau.
Ubicada en el municipio de Tepeyahualco, la Laguna de Alchichica guarda un misticismo especial que ha sido alimentado por los pobladores de la zona, los cuales juran que en esta laguna existe actividad poco convencional.