En la actual temporada de frentes fríos los sistemas han sido más severos en comparación con los registrados en 2016-2017, lo que genera marcados descensos de temperatura en su paso por el país.
Esta condición es modulada por los patrones oceánico-atmosféricos que regular el clima. Un ejemplo es el índice de la Oscilación del Ártico (AO, por sus siglas en inglés), cuando la AO se encuentra en fase positiva, la corriente en chorro se intensifica y genera una circulación cerrada al norte de Estados Unidos y Canadá, encapsulando las masas de aire polar sobre dichas latitudes.
Por el contrario, cunado la AO se encuentra en fase negativa, la corriente en chorro se debilita y su trayectoria se vuelve más ondulada, lo cual permite el desplazamiento de masas de aire polar a latitudes más bajas, favoreciendo la llegada de masas frías a México.
“Debido a las condiciones oceánico–atmosféricas se estima el descenso de masas de aire polar sobre #México los días restantes de enero”.