Darle diferente categorización jurídica a los delitos contra la vida se entiende, en términos políticos, como una llamada de atención en cuanto a la violencia de género que sufren gran cantidad de mujeres no solo en el estado de Puebla, sino en el resto del país.
Políticamente es viable, académicamente también; sin embargo, constituir toda privación de la vida en contra de toda persona del sexo femenino como feminicidio sería un retroceso, aseguró Erick Gómez Tagle López.
Aseguró que en primera instancia comparten el mismo vinculo que es la vida y segundo ”porque podríamos hablar en algunos casos que podría ser un homicidio agravado por motivo del odio o los actos de crueldad que vienen asociados; sin embargo, crear dos figuras distintas me parece que no se justifica”.
En entrevista con Imagen Poblana, el también doctor en Ciencias Penales y Política Criminal señaló que el fenómeno se ha invertido, argumentando que anteriormente los delitos se clasificaban de acuerdo con el estado de vinculación entre víctima y victimario.
“Al padre, parricidio; un menor de edad, infanticidio; el cónyuge, conyugicidio, y de pronto dijeron todos son homicidios, porque todos partimos de la dignidad humana y todos compartimos el vínculo que es la vida”.
En tal caso –indicó- lo que hizo el Legislativo desde hace mucho tiempo fue diferenciar los homicidios agravando en relación al grado de parentesco, pero todos eran homicidios. En este caso, la lógica debería funcionar igual, todos son homicidios, aunque algunos tiran a agravarse en virtud de las condiciones de la vulnerabilidad de la víctima o en virtud de la indefensión que esta presenta, pero todos deben llamarse homicidios.
“Ya cuando el Congreso de la Unión determinó crear la figura del feminicidio, fue básicamente para hablar de las diferentes formas de violencia contra las mujeres, una de las cuales podría terminar en la privación de su vida, esa ley ya se entendió y de alguna manera la comunidad académica lo ha aceptado”.
No obstante, para Gómez Tagle indicar que cualquier privación de la vida debe llamarse feminicidio sería un error muy grave, porque si no la lógica sería crear un tipo penal diferente para cada acto de violencia que termine con la vida de la víctima.
“Por ejemplo, cuando son homicidios homofóbicos, tener que crear otra figura distinta y empezaríamos a regresar a lo mismo, cuando es a un pequeño, seria infanticidio y esa no es la lógica, por lo tanto, mi postura es en contra”.
Aseguró que actualmente el delito de feminicidio es muy difícil de probar, ya que la mayoría de los casos que no se han podido sustentar judicialmente, han sido clasificados como homicidios, por lo que pensar en tipificar todo homicidio en contra de una mujer como feminicidio, sería un retroceso en la ley.
Por su parte, el presidente del Consejo Coordinador Empresarial, Carlos Montiel Solana, exigió a las autoridades resolver los problemas de seguridad en contra de jóvenes estudiantes, pero también hizo un llamado a la sociedad a revisar en el círculo de influencia más cercano “si verdaderamente estamos educando como debe ser a nuestros hijos, o estamos educando a niños que en 10 o 15 años, van a terminar siendo homicidas”.
Indicó que sin ser un experto en estos temas de seguridad, al final de cuentas se habla de la muerte de un ser humano que no debió morir en esas condiciones
Hizo un llamado a la autocrítica como sociedad, a cuestionarse sobre la educación que los padres están dando a sus hijos, “que es lo verdaderamente importante y trascendente ¿qué le estamos transmitiendo? ya que es ahí donde nace este tipo de delincuentes y asesinos”, finalizó.