Si tú eres de aquellos que antes de dormir se ponen a pensar en sus problemas y después ya no pueden conciliar el sueño, debes saber que esta situación la padecen millones de personas en el mundo, ya que es muy común dedicar los minutos previos al sueño un pensamiento hacia todas las actividades del día.
El problema es que antes de dormir afloran en nuestros pensamientos ideas negativas, relacionadas con los problemas que nos aquejan, las deudas que hay que pagar o las enfermedades. De acuerdo con especialistas, la actividad nocturna tiene cierta influencia en la magnificación de las ideas negativas.
Por lo anterior, no es aconsejable dedicar los minutos nocturnos previos a nuestro sueño a pensamientos negativos que probablemente son equivocados y a problemas que muy probablemente tendrán solución. Seguramente has experimentado que durante la mañana, lo que parecía tan pesimista ya no lo es tanto.
Así es que si tú sufres de este fenómeno y los pensamientos de terror literalmente te quitan el sueño, lo aconsejable es que dejes de pensar en eso y mejor ordenes a tu cuerpo que descanse. De esta manera tendrás energías para afrontar al día siguiente el problema que se te presente.
