A veces, para muchas mujeres, el ambiente laboral es bastante difícil cuando se trata de competir con hombres, sobre todo si estos resultan ser machistas y piensan que merecen ganar más dinero que una mujer, aunque hagan el mismo trabajo.
Harta de esta situación, Claudia de Marchi, una abogada brasileña de 34 años, decidió abandonar su carrera para tomar un rumbo completamente diferente: convertirse en sexoservidora.
De acuerdo con información de Infobae, la brasileña brinda sus servicios a políticos y empresarios, cobrándoles 185 dólares (aproximadamente 3,700 pesos) por hora, incrementando así su salario en comparación con lo que ganaba como abogada.
Claudia asegura que el principal motivo para dedicarse a este empleo fue por no aguantar más el machismo y egoísmo de sus colegas y clientes.
Este cambio drástico de profesión se ha convertido en una gran decisión para la brasileña, pues asegura sentirse liberada y ha encontrado gran satisfacción al ganar 125,000 dólares (2 millones y medio de pesos) al año.
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