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La autopista México-Puebla, específicamente el tramo comprendido entre el acceso a Parque Finsa y el Outlet, se ha convertido en un auténtico cementerio de llantas, todo gracias a las pésimas condiciones en las que está esta concurrida vialidad.
En un recorrido efectuado por Imagen Poblana, se pudo comprobar el riesgo que representa para los automovilistas circular por esta pista, pues se observaron diversos baches que han afectado a decenas de autos en los últimos días.
Este problema se ve en ambos sentidos, por lo que ya es habitual encontrar vehículos orillados con alguno de sus neumáticos reventados o en el peor de los casos con el rin completamente dañado.
Pese a las denuncias de los usuarios de esta vialidad, ni Caminos y Puentes Federales (Capufe) ni Carreteras de Cuota Puebla han atendido estos problemas, que pueden agravarse con las lluvias.
También podrían presentarse problemas más graves en esta carretera, debido a que si el auto circula a gran velocidad puede generarse un accidente y derivar en afectaciones a terceros.
Algunos automovilistas que sufrieron ponchaduras gracias a estos baches, denunciaron que ni Capufe y Carreteras de Cuota se quieren hacer cargo de los daños. Destacaron que la agencia de seguros de esta vialidad no quiso pagar por estas afectaciones.
Resulta urgente que las autoridades pongan cartas en el asunto y reparen esta parte de la vialidad, debido a que es una de las más transitadas por trabajadores de las empresas que se ubican en esta zona.
